El cierre de la frontera con Estados Unidos por casos de gusano barrenador en México mantiene varados más de 120 mil cabezas de ganado en Sonora desde hace casi 90 días. Aunque no hay fecha para la reapertura, ganaderos y autoridades federales trabajan en negociaciones y en cumplir protocolos sanitarios, como la instalación de trampas para detectar moscas.
La suspensión de exportaciones ha causado pérdidas económicas significativas, ya que muchos productores venden el ganado en el mercado nacional a precios hasta 35% menores que en EE.UU. La incertidumbre persiste tras un breve permiso de exportación en julio, que se revocó por nuevos casos detectados en el centro del país.